La socia peruana y tal vez testaferra de Odebrecht, la Constructora Graña y Montero (G y M), sepresenta por primera vez a la opinión pública y sin decirlo escoge el papel de víctima, que en la práctica se lee: el yo no fui o el del ingenuo que proclama que nos engañó Odebrecht y con este ropaje teatral proclama a la revista Caretas: "No sabíamos nada".
Y es así que en el número de esta semana de Caretas, en un reportaje que hay que tener presente, el gerente de G y M, Mario Alvarado Pflucker, salió a iniciar las rondas de mentiras de esta empresa para salvar su patrimonio y evitar que sus directivos y representantes vayan a la cárcel por muchos años.
Alvarado Montero escogió a la revista Caretas, un medio independiente, para salir a la opinión pública y aclarar por lo menos a los estratos medios altos y altos que no son corruptos.
Sorprende que G y M, de la cara en Caretas y no haya salido en alguno de los diarios de la multitud de periódicos del Grupo El Comercio, o en el canal 4 o en el Canal N, que tambi{en le pertenecen y que tienen el mayor raiting.
Acaso será que ya los dueños de El Comercio saben del desprestigio que tienen ante la opinión pública y tienen que salir en otros sitios.
El nuevo Virrey de Odebrecht en el Perú, Mauricio López también evitó hasta el momento salir en El Comercio y prefirió ser entrevistado el domingo en La República, que no pertenece al monopolio mediático aunque sus dueños son socio de El Comercio en el Canal 4.
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